Sinó uno podría creer que vive en un mundo de rosas y que todos somos iguales y esas cosas. Un manager siempre podrá demostrarte que no es así. Claro que estará allí el primer día de grabación, es como si no hubiese un cura inaugurando un pantano, y que por supuesto llegará después de que todo el instrumental esté instalado y el esfuerzo físico no sea mayor que llegar del parking al estudio. Si se quiere detectar a un manager en un estudio hay una prueba infalible, solo hay que decir en alto "pilla el fa sostenido" y saldrá por patas pensando que es un nuevo instrumento que requiere de su espalda. Pero son de agradecer las visitas del manager al estudio, el meneo rítmico de la cabeza y su expresión de sumo interés provocan constantemente un movimiento afirmativo, de adelante hacia atrás, que eleva el espíritu, al menos el suyo. Así que no resultará raro que tras su júbilo por la finalización de la excelente toma sea el bajista el que le tenga que explicar que hubiese quedado mejor si no se le hubiese roto la cuerda. Como se puede ver sigue sin haber mucho que contar, algunas grabaciones mas, algunas voces de referencia, y prepararse para finalizar mañana la grabación de las bases de este nuevo álbum. Y que a falta de visita de manager, en el día de hoy, la cena ha sido mas bien escasa y tenemos fotos de la prueba.
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