Seis cuerdas son muchas cuerdas y cambiarlas todas ellas no es fácil tarea. Es en base a ello el cuerpo de guitarristas una élite en lo grupúsculo de la sociedad musical. Cuando el ruido ocupa ya mas de mitad de las pistas, el tiempo se detiene y el resto de músicos o técnicos contienen la respiración para poder registrar la sutileza ante desigual lucha, de dos pares de 5 dedos contra 6 cuerdas. Y uno no puede creer que tengan el instrumento trucado pues ya se encargan ellos de demostrar tal imposibilidad manejando a cada rato una guitarra distinta, incluso en una misma canción, mas todavía, dicen quien incluso en una misma nota. Ya se sabe, solo hay que poner en las manos de un guitarrista una mierda de guitarra y dirá que es una guitarra de mierda, mientras no deja de tocarla. Después de la tontería nada que destacar, grabando algunas guitarras mas y a ver si podemos suber algun riff. Hoy ST dispuesto a comenzar con la grabación del saxo. El viernes llega Joe Hardy desde Houston y habrá que aprovechar para hacer algunas fotos que rocen la decencia en el formato, aunque dificilmente en el contenido.
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